Si hablamos de vino, de bodegas y turismo, tenemos muchas opciones, pero sabemos que Mendoza es el lugar por excelencia y ha hecho de eso una marca distintiva. En la provincia de Río Negro, Bariloche y El Bolsón se consolidaron no sólo como productores de cerveza artesanal con calidad internacional sino, también, como promotores del turismo cervecero (con propuestas para los más exigentes).
Bariloche es el mayor productor y consumidor de cervezas artesanales del país, gracias a su herencia alemana y suiza y a las condiciones ambientales que hacen posible allí el cultivo del lúpulo. Dos puntos a favor. La revista Forbes, por ejemplo, hasta le dedicó una nota a esta ciudad patagónica y un periodista de ese medio fue especialmente hacia allí para probar la cerveza. “Sabe a buena cerveza”, escribió, bien conciso.
No por nada hace unos meses fue en esa tierra de alturas y buen chocolate donde nació la primera cerveza 100 % argentina, realizada a partir de una levadura que descubrieron en la región, la Saccharomyces Eubayanus. Hoy están evaluando todas las posibilidades que abre ese descubrimiento.
La cerveza tiene cuatro ingredientes básicos: el agua, la malta, la levadura, el lúpulo. Este último se empezó a cultivar de la mano de las colonias de galeses en Chubut. En 1956, los productores empezaron a trabajarlo en El Bolsón, porque observaban que tenía condiciones idénticas a las de los países europeos. En ese valle hoy se observa la gran superficie de cultivos de lúpulo, que crece en forma de enredadera. Para mil litros de cerveza artesanal se usan entre uno y tres kilos. La planta va siendo guiada con alambres e hilos y crece entre septiembre y diciembre.
Pero, claro, lo mejor del turismo cervecero está en el amplio abanico de bares especializados, y para enriquecer la propuesta, en Bariloche está el Beer Tour, que ofrece un recorrido por tres fábricas de cerveza artesanal en la ciudad: Berlina, Gilbert y Patagonia. Además, hay degustación, por supuesto (todo, con traslado ida y vuelta, vale unos dos mil pesos). El paseo dura unas seis horas. Mucha cerveza. Mucha comida para acompañar.
Y para terminar, te compartimos dos maridajes que van perfecto, según la gente del Beer Tour: amber lager con queso parmesano, dry stout con queso gouda ¿Vos con cuál combinás?
