Dicen los que saben que esta cuesta tiene: 970 curvas en 60 kms de recorrido con precipicios y vistas que cortan el aliento. En Catamarca hay un lugar que parece detenido en el tiempo y que tiene, además, esa impronta tan fascinante de los caminos vertiginosos y de altura. Luego de pasar por Chaquiago y Choya, subiendo, justo, por la cuesta de Capillitas, con su impresionante entorno, llegamos a un complejo minero que durante años fue importante para Andalgalá porque daba, en especial, la bella rodocrosita.
Sí, una de las piedras más hermosaas por su estructura y coloración, vivió acá su época de oro. Si venís a pasear a Catamarca, ese lugar, con sus paisajes y su antigua mina, la Santa Rita, es uno de los destinos para poder recorrer.
En esa zona, además, a esos 3100 msnm, hay una hostería temática, la «Refugio del minero», que de alguna manera recoge el espíritu del lugar. Una construcción del arquitecto andalgalense Ricardo Lacher que es un clásico para quienes visitan la zona y que irrumpe en el paisaje con toda su presencia.
Para recuperar la actividad turística, Catamarca tiene una serie de descuentos que podés averiguar acá: LINK y para ingreso a los municipios, acá están todos los protocolos: LINK
