Vuelta a los dulces más originales de Argentina

Vuelta a los dulces más originales de Argentina

2805
COMPARTIR

Algunos son elaborados en base a productos cien por ciento autóctonos, pero otros son una suerte de adaptación local de delicias venidas desde muy lejos, como es el caso del ruibarbo. ¿Y vos? ¿Ya los probaste?

Uno de los placeres más grandes de cualquier viaje es descubrir que, más allá de los paisajes y de los saberes nuevos, al volver llevamos en la valija un montón de sabores, recetas y delicias que nos sorprendieron tanto o más que las montañas o la playa. La experiencia de descubrir un nuevo sabor en medio de un viaje es una de las cosas capaces de convertir ese recorrido en un paseo inolvidable. ¿O no?

A nosotras, en Descubrir Turismo, a la vuelta de cada nuevo viaje nos encanta intercambiar novedades y descubrimientos. Y así fue como nos dimos  cuenta de la cantidad de mermeladas, jaleas y dulces increíbles que descubrimos  andando. Y muchas veces notamos que a menudo son maravillas que al regreso no resulta fácil conseguir.Delicias como el dulce de ruibarbo o la mermelada de berenjenas, por ejemplo, abundan en Patagonia o en la Mesopotamia pero escasean cerca de casa . Pero, mejor, vamos ya mismo a este recorrido tan delicioso como sorprendente.

Sauco, azul profundo

 Esta planta, de la familia de las madreselvas, se da bien en ambos hemisferios, en la Patagonia argentina alcanza un esplendor notable. El arbusto da flores blancas y amarillas y termina generando unas bayas de color azul oscuro con las que se elaboran dulces y mermeladas. Dato a tener en cuenta: el fruto verde o inmaduro, al igual que las hojas y las ramas,  son tóxicas y por lo tanto no se pueden comer. Pero una vez maduro y cocido es delicioso preparado en dulce. Sobre todo en la zona de El Bolsón, el dulce de saúco (pronunciese con acento en la U) es uno de los manjares a probar. Se puede acompañar con galletas o pan casero, pero los más exquisitos aseguran que es maridado con un buen queso (un Camembert, por ejemplo) cuando el dulce despliega todo su sabor.

Berenjenas asombrosas

Suena insólita, pero es deliciosa. Se hace con berenjenas y es una mermelada absolutamente distinta y que te va a sorprender. En algunos lugares de la Argentina se la combina con nueces (como sucede en Tucumán) mientras que en provincias como Entre Ríos se la suele asociara las nueces de pecán y también se la combina con miel.

En San José, Entre Rios, este dulce exquisito es la estrella de un recorrido gastronómico con más de 22 puntos en donde saborear delicias locales. Alli, desde el programa Sabores Entrerrianos se promueve la gastronomía local y en ese menú de propuestas el dulce de berenjenas impacta a todos los visitantes.

 

 Cayote de cielo arriba

Parece una sandía pero no: es el cayote, que –según donde crezca- también es llamado chicayote. En cualquiera de los casos se trata de una curcubitácea fibrosa y muy rica en minerales, que una vez hecha dulce se convierte en un manjar es esos que te ponen a suspirar cada vez que te acordás de ellos. El dulce de cayote dulcísimo, oscurón, lleno de fibras. Es bien del NOA, pero también en Cuyo podrás tentarte con él. ¿Cómo se come? En empanadillas pero también en el clásico “dulce con quesillo”, un postre en el que las fibras dulzonas del cayote se unen con el queso de cabra en un plato para probar y amar. ¿Apostamos?

Ruibarbo: nostalgias de las islas

Tiene el aspecto de una acelga, pero el tallo semeja un puerro de color con matices rojizos. Con ustedes, el ruibarbo, una planta traída a la Argentina por los primeros ingleses, en cuya gastronomía sirve para todo: para hacer dulces, tartas, chutneys…Se lleva de maravillas con lo salado y con lo dulce, y acompaña de maravillas a carnes de todo tipo.

Imposible volverse de Santa Cruz sin un buen frasco de mermelada de ruibarbo, y no asombrarse con la planta y con su historia. Porque al ruibarbo, al sur del sur, lo llevaron los primeros colonos galeses y todos los que quisieron recuperar aquí parte de lo perdido allá. El dulce de su infancia, entre otras cosas.

Calafate, la planta de los mil usos

Para comerla, para usar sus frutos como tintura, para abrigarse al calor de una fogata hecha con sus ramas secas….Los pueblos originarios usaron al calafate (un fruto azulado y extraordinariamente rico en vitaminas A y E) para absolutamente todo, incluída la pintura ritual de la piel en algunas ceremonias.

Hoy el calafate (además de haber bautizado a una famosa y bellísima localidad de Santa Cruz) se consume en conservas, en mermeladas y fresco, con una promesa: el que coma calafate estando en la Patagonia, volverá a ella. Nosotras lo probamos y confirmamos que el hechizo funciona.

¿Sabias que…

Según una leyenda, en el origen del calafate hubo una vieja hechichera tehuelche abandonada por su familia por no poder llevarla al norte durante los meses fríos? Cuando el calor volvió y la familia regresó, la encontró transformada en un arbusto que da abrigo y alimento, para que nadie tuviera que volver a irse en busca de comida y calor. ¿Qué tal?

Si te quedaste con ganas de más, acá te contamos cuáles son los sabores que no podés dejar de probar si vas para Salta ¡Buen viaje!

Los platos imperdibles si viajás a Salta

DEJA UNA RESPUESTA