Se acerca fin de año y esos viajes que nos debemos toman forma ¿Quién se resiste a un viaje con amigas? Una cabaña, alguna posada y charlas y risas… Hoy armamos este ranking para quienes andan con ganas de pegarse unos días de esos que energizan el alma junto a las amigas queridas
¿Vienen?
Mendoza, brindis y naturaleza
Mendoza tiene un sistema aceitado de vuelos, toda la infraestructura de una ciudad super experimentada en turismo, las montañas como telón de fondo y las bodegas que en verano hasta pueden recorrerse en bicicleta (también se puede alquilar un auto o hacer transporte público). Es un destino elegido muchas veces por grupos de amigas que desean pasar un fin de semana inolvidable.
Acá te dejamos esta nota en la que te contamos cómo disfrutar de Mendoza en tres días a full: Seguir leyendo…
Colón, río y spa
Está bastante cerca. En menos de cuatro horas llegás. El río Uruguay te recibe con toda su magia. Ahí cabañas, hostels, hoteles, departamentos, de todo, y tenés termas para relajar y hasta una escapada para ir a conocer El Palmar, si se trata de un grupo de amigas aventureras. Cerrar una atardecer con ricos mates es digno de foto para el recuerdo.
Si querés conocer algunas pistas para disfrutar de Colón, seguí leyendo…
Tandil, picadas y caminatas
Otra ciudad bastante cercana a Buenos Aires y que se caracteriza por su belleza. Limpia, pujante, es una localidad que tiene todo para mezclar hermosos paseos por la sierra con una gastronomía deliciosa. Un plan infalible: Alquilar alguna cabaña (hay muchas y muy bellas en las afueras de la ciudad, con precios para todos los bolsillos y parques verdes) y pasar la tardecita con una picada y un buen vino. Al otro día, algo de trekking para equilibrar.
Capilla del Monte, atardeceres y mística
Acá tenemos que viajar un poco más. Podemos ir en avión hasta Córdoba capital y desde ahí tomar un micro o alquilar un auto hasta Capilla del Monte. Allí hay de todo también: Hoteles boutiques, hostels, cabañas en el medio del monte, lo que busques. Con spas, meditación, clases de yoga, alimentación saludable…. Si viajás con amigas, podés hacer caminatas inolvidables, cambiar el aire con la pureza de la zona, y hacer algunas terapias alternativas, nivelación de chakras, reiki, y demás para alimentar la parte más mística.
Y si alguna es fanática de los cactus, no van a querer perderse este paraíso: un vivero con especies rarísimas.
Ostende, olas y silencio
Está bien cerca de Pinamar por si alguna necesita una dosis de movida más urbana. Tiene amplias playas y grandes dunas con tamariscos. Ostende es un lugar pionero en turismo y en sus rincones se respira la historia. Para quienes gustan de la cultura, en el Viejo Hotel Ostende (una edificación de 1913 con cerca de ochenta habitaciones) se realizan todo tipo de actividades, algunas de las cuales son abiertas a visitantes que no estén alojados en el hotel. Hay charlas, encuentros literarios, cursos, jornadas de cine y talleres de arte.
