“Salta y Jujuy inspiraron mi colección más importante”

“Salta y Jujuy inspiraron mi colección más importante”

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Diseñador de alta costura, firma fija en los vestidos de las alfombras más glamorosas, Benito Fernández pertenece al mundo de la moda desde la cuna y a través de su profesión ha viajado por todo el mundo y por toda Argentina. Hoy nos comparte sus recorridos, sus preferencias para viajar y nos regala una anécdota viajera imperdible.

Para seguirle el rastro podés buscarlo en Instagram: @benitofernandez o en Facebook: @benitofz. En Twitter es @BENITOfz

¿Qué preferís? ¿Playa o montaña?

¡Qué dilema! En la playa, tal vez, me divierto más y tengo más programas para hacer, que es lo que más me gusta, pero tengo que estar en un lindo lugar y sin usar el auto. La montaña es el lugar donde más me desconecto. Sobre todo, cuando hago ski. Es por excelencia, el viaje en donde más me desconecto del trabajo.

¿Qué viaje por Argentina recordás más y por qué?

Desde chico viajé muchísimo por el exterior. Mi tío fue Benito Fernández y fue gobernador de Chubut. Él vivía en Esquel y los viajes de Esquel a Bariloche eran muy lindos en familia cuando yo era muy chiquito. Esto era en los años 60’ y 70’.

Mi trabajo me llevó a tener muchos viajes divertidos por todo el país, desfiles. Y hace diez años que soy curador de la Feria Puro Diseño. Ahora también voy a hacer la curación de los stands de cada provincia que va a intervenir en la feria. Así que tengo viajes increíbles. El Norte ha sido muy fuerte en mi carrera, sobre todo Salta y Jujuy que han inspirado mi colección etnia, que fue la más importante de mi carrera. La llevé al Fashion Week de Nueva York. Natalia  Lobo usó un traje en 2009 para un Martín Fierro y fue criticado y después revolucionó todo este concepto de “lo nuestro” que puso de moda todos nuestros telares, pompones, colores y nuestra vida.

¿Qué fue lo peor que te pasó en un viaje?

¡Olvidate! En los viajes me pasa de todo. Pierdo todo. En Estados Unidos he perdido el pasaporte, las tarjetas de crédito, los bolsos. Todo lo que se te pueda ocurrir ¡Vuelos! Pero lo peor fue cuando fui en casa rodante con mi hermano que recorrimos todo California, San Francisco, Santa Bárbara, Monterrey, Los Ángeles y después subimos a Las Vegas e hicimos el Cañón del Colorado y ahí nos quedamos a dormir y nos despertamos ¡congelados! Porque se había apagado la  calefacción y la pasé muy mal. Pero, también fue el viaje más lindo que hice en mi vida, salvando ese percance.

Presentando su colección Invierno 2018 (Foto: @benitofernandez Instagram)

¿Qué es lo que siempre llevás?

Traje de baño. Siempre llevo. Es lo primero que pongo en el bolso. Vaya a la nieve, a la playa o a la ciudad. Me muero si hay una linda pileta o un spa y no lo puedo aprovechar. Es mi fetiche: siempre poner un traje de baño.

¿Alguna anécdota para contarnos?

El viaje más disparatado fue cuando me invitaron a un casamiento en Marbella. Yo iba primero a Nueva York y, caminando por la Quinta Avenida, había dos chicos a los que yo les compraba géneros acá, en Buenos Aires. Cuado me subo a un taxi, uno de ellos, el menor, dice: “Ahí está Benito Fernández”. El otro no llega a verme. Yo tenía que volar primero a Madrid y después a Marbella, pero la autopista estaba totalmente colapsada. Llegué, con mi portatrajes y un bolso, y el avión estaba demorado ¡Podía perder el otro vuelo! En Marbella me esperaba una persona, pero yo no tenía su teléfono. Casi lo pierdo pero un camión chocó la rueda del avión y tuvieron que demorarse en el otro también, así que pude entrar. En Marsella me habían perdido el portatrajes, así que tuve que ir corriendo el día del casamiento a comprarme un traje nuevo. Los taxis demoraban media hora y así no iba a llegar, entonces me subí a un bus y le ofrecí al chofer 100 euros para que me llevara al hotel. El hombre cambió el recorrido para llevarme ¡Yo parecía Carlitos Balá! En el hotel nos pasaba a buscar otro bus que nos llevaba al casamiento. Yo no sabía dónde era. Cuando llego, me cruzo a los dos hermanos que había visto en Nueva York y el mismo hermano dice: «Ahí está cruzando la ruta Benito Fernández«. Como justo me meto entre los árboles, el otro no me ve, así que dice: «¡Vos estás loco!». El bus que nos llevaba al casamiento se rompe en el camino y cuando llego al casamiento veo de nuevo a los hermanos y el más chico le dice al otro:  “No te pongas loco, pero está entrando al casamiento Benito Fernández¡Fue desopilante! Ahí fue la primera vez que vi a Máxima Zorriagueta que todavía no estaba de novia con el Príncipe.

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