
Hay días que son así, contradictorios: el 28 de junio es el Día Internacional del Orgullo LGTB y hoy justamente en Buenos Aires condenaron a un año de prisión en suspenso a Mariana Gómez, que en 2017, mientras besaba a su esposa en Constitución, fue agredida por la policía. #ProcesadaPorBesar es el hashtag que se viralizó en redes, para mostrar el repudio a ese fallo. Es que pese a la injusticia de la situación, Buenos Aires es una ciudad gay friendly y acá te contamos por qué.
Desde hace años Buenos Aires se ha consagrado como una ciudad gay-friendly y, de la mano de su respeto por la diversidad, recibe cada año a millones de turistas bajo la bandera del arcoiris. ¿Qué buscan? ¿Qué es lo que más les gusta de la ciudad del tango, y de toda la Argentina?
Por décadas, ver a una pareja del mismo sexo mimándose o caminando tomada de la mano no era algo habitual en Buenos Aires. De hecho, había que viajar al exterior para que algo tan simple como eso dejara de ser un acontecimiento y, con suerte, sólo en alguna ciudad de Brasil o de Europa la escena dejaba de llamar la atención. “Tierra de machos” y de “minas fieles de gran corazón” (según reza la lengua del tango) por años Buenos Aires fue una ciudad tan hostil como cargada de prejuicios y de estereotipos. Felizmente, en los últimos años esa situación comenzó a modificarse y tal velocidad que en 2016 la misma ciudad que consagró a Carlos Gardel fue elegida como el mejor destino de viaje para el colectivo Lésbico, Gay, Transexual y Bisexual (LGBT).

¿Por qué? Entre otras razones, porque es una combinación más que atractiva de oferta cultural, servicios hoteleros aggiornados (en Buenos Aires, a diferencia de lo que todavía hoy sucede en muchos destinos de Latinoamérica, nadie va a sorprenderse ante algún hotel específicamente orientado hacia la comunidad ni si en un hotel tradicional una pareja gay pide una cama de las llamadas “matrimoniales”), un dólar que plantea un cambio favorable para los visitantes, una legislación de avanzada y –aun con excepciones- una actitud ciudadana de respeto hacia la diversidad. Dos chicas pasean abrazadas por Diagonal Norte, dos hombres caminan de la mano por Florida y ya nadie se queda mirando. Algo que para un colectivo que ha sido tan perseguido y estigmatizado se recibe con una sonrisa. Y con algo todavía mejor: la promesa de volver.
“Lesbianas, gays, bisexuales y trans fuimos, somos y seremos viajeros y viajeras, y seguiremos practicando una de las pasiones más fuertes del ser humano que es conocer, viajando y viviendo de primera mano, destinos, culturas, comunidades”, explica al respecto Pablo de Luca, directivo de la Cámara de Comercio Gay Lésbica Argentina.

“De hecho, los viajeros del colectivo LGBT viajan 7,3 veces más que sus pares heterosexuales en los Estados Unidos y 3,4 veces más en América Latina, lo que nos convierte de por sí en viajeros mas frecuentes y un segmento atractivo para cualquier prestador de servicios turísticos o un destino. Además, son fieles a los destinos en los que se sienten respetados y bienvenidos”.
Algunos analistas del mercado turístico atribuyen al hecho de que a menudo estas parejas conforman un buen ejemplo de lo que en marketing se llama DINKS. Traducción: double income, no kids o “doble ingreso y sin chicos”. Ergo, el dinero que en otras circunstancias sería destinado a pagar gastos de educación, salud, vestimenta y todo eso que requieren los chicos, en estos casos se destina al disfrute y al buen vivir. Lo que es sinónimo de viajar, claro.
Sin embargo, y más allá de lo impresionante de los números en juego, muchos prestadores de servicios parecerían tener un desconocimiento notable de ese segmento. Muchos ignoran, por ejemplo, que 51% de estos turistas son mujeres, tal vez porque el estereotipo siempre pensó en varones solos o en pareja y no en las muchas variantes en juego, que van desde familias homo parentales hasta grupos de amigos, parejas mayores, etc.
Felizmente, “en los últimos años y de la mano de leyes que en diferentes lugares del mundo igualan nuestros derechos, se genero un terreno más propicio para enfocarse abierta y auténticamente en ese segmento de mercado que formamos las personas LGBT al que pocos se animaban antes a dirigir sus comunicaciones comerciales. Dicho esto, no podemos olvidarnos que hoy, aun 76 países criminalizan de una u otra forma la homosexualidad con penas que van desde azotes en la via publica, carcel e incluso la misma pena de muerte. Son 76 países en los que por el solo hecho de ser gay lesbiana bisexual o trans género, nuestras vidas corren peligro”, detalla el especialista.
En este contexto hostil, nuestro país se recorta como un destino amigable y respetuoso de las diferencias. “Argentina fue de hecho el primer país en la región en aprobar leyes como la de Matrimonio Igualitario, o tan progresistas como la de Igualdad de Género, y no sólo eso sino hacer extensivo el ejercicio de estos derechos civiles no solo a nuestros habitantes sino a todos aquellos que pisen nuestro territorio. Poder promover Turismo LGBT de la mano de Derechos Igualitarios para nuestro colectivo fue de un impacto increíble en la comunidad LGBT internacional”.
¿Y qué le gusta tanto a este colectivo de la ciudad de Buenos Aires? ¿Qué es lo que hay en ella –y en el resto de la Argentina- que les genera ganas de volver, como también dice el tango? Como primera aclaración cabe decir que el destino preferido no es sólo la Reina del Plata sino también Patagonia, Rosario e Iguazú. Pero si dudas Buenos Aires sobresale entre todas las demás por una mezcla de atractivos en el que más allá del factor económico lo cultural y lo social pesa y mucho.
“Entre los motivadores más importantes para visitar la Argentina está la ciudad de Buenos Aires, la gastronomía y vinos, la cultura, la vida nocturna y naturalmente lo amigable de nuestros destinos. Además, la arquitectura, los atractivos naturales, la diversidad, su gente, su vida nocturna…Y saber que es un país pionero en el trabajo por la igualdad de las personas LGBT en nuestro continente”, precisa De Luca.
Y, teniendo en cuenta que según datos de la Organización Internacional de Turismo cada año recorren el planeta por placer 1200 millones de personas, de los cuales 10% (esto es, 120 millones) pertenecen al colectivo, no es extraño que empresas turísticas de todos los tamaños quieran ganar su atención. De allí también que desde hace diez años se realice una feria internacional del turismo (llamada GNetwork 360) orientada al segmento y que hoy está considerada una de las cinco ferias turísticas más importante del mundo. Su próxima edición se hará -¿cómo no?- en Buenos Aires, y no por casualidad.

“Buenos Aires es definitivamente la capital LGBT de América Latina, por muchos motivos, y es producto de muchos factores. Fue elegida en 2006 y 2008 mejor destino LGBT emergente, y mejor destino LGBT internacional respectivamente, además de mejor destino LGBT de América Latina en 2016. El Ente de Turismo de la ciudad de Buenos Aires viene desarrollando en los últimos años una estrategia que posiciona a la ciudad entre los mejores 10 destinos LGBT del mundo”, concluye.
¿Sabías que….
15% de la inversión total en turismo alrededor del mundo está a cargo del colectivo LGBT? Además (según viva en Latinoamérica, Estados Unidos o Europa) este segmento viaja entre 3 y 7 veces más que sus pares heterosexuales. ¿Qué tal?