¿Te acordás? Ya te habíamos hablado sobre los alfajores de Argentina. Los tucumanos se preparan con miel de azúcar de caña, los santafesinos nos tientan con esa crocantez única del rogel y los cordobeses son perfectos para los fanáticos de los rellenos frutales. Alfajor Argentino, historia de un ícono, de Jorge D’ Agostini, es un libro que nos invita a deleitarnos y aprender sobre su historia. Un recorrido completo con recomendaciones, tips, historias y regiones donde se consume cada sabor. Acá te contamos todo.
Eduardo Ruiz, Capitán del Equipo Argentino de Pastelería jurado Coupe du Monde de la Pattiserie, fue uno de los pioneros del alfajor. Allá por 1840, ya aparecían las primeras recetas. Muchas de ellas se mantuvieron en el tiempo y se le fueron sumando nuevas de cada región de Argentina y hasta las más gourmet. Marplatense, cordobés, de maíz o de «Los Barrios», dependiendo la provincia, cada alfajor tiene una identidad propia que refleja la gastronomía local.
El autor del libro afirma que nuestro paladar tiene un intensa impronta árabe, inclinada hacia los sabores dulces, por ello, la golosina se mantiene vigente. La publicación fue declarada de interés cultural por el Ministerio de Cultura de La Nación.
¡Atento! La tentación está a un click de distancia. Podés ingresar a www.alfajoriconoargentino.com.ar y recorrer un mapa que incluye todas las casas artesanales de alfajor.
¿Sabías? La yerba mate, el vino malbec, el dulce de leche, la empanada y claro, el asado, ya son considerados Patrimonio Cultural Alimentario y Gastronómico de Argentina ¿y el alfajor? Aún no, pero esperemos que ¡pronto sí!
